3.4.08

Esta es la historia de Sebastián



Sebastián era un niño muy pobre muy pobre muy pobre

Pero a la vez muy feliz muy feliz muy feliz




No estaba consciente ni de su pobreza, ni de su felicidad, para él todo lo que le rodeaba era su normalidad.

Salía todas las mañanas con un cubo en la mano, lleno de hallaquitas dulces, hallaquitas que la madre preparaba todas las noches porque ella durante el día limpiaba casas de otra gente que no eran, ante los ojos de Sebastián, tan hábiles como su mamá, porque ella podía limpiar la de ella y las de los demás en un día nada más.

Mientras amasaba las hallaquitas de noche, la madre de Sebastián siempre cantaba y cantaba.

Sebastián ayudaba a sus hermanitos pequeños con las tareas de la escuela, esas tareas que él sabía hacer a la perfección, porque ninguno había llegado al sexto grado que era hasta el último curso que Sebastián pudo estudiar, Sebastián se sentía orgulloso porque ya sabía todo lo que a ellos les enseñaban y esperaba que algún día ellos le superaran en el nivel porque gracias a él y a su esfuerzo podrían ir a la escuela para siempre.

Eso era lo que Sebastián quería, cuando se quedaba dormido en el autobús que le conducía al centro de la ciudad donde estaba el mercado donde trabajaba, Sebastián soñaba lo que deseaba para todos, quería tener a su mamá como una Reina, la Reina de su vida, merecía lo mejor, para sus hermanos siempre soñaba lo mismo: una cama para cada uno así no tendrían que dormir amorochados los 5 en la misma cama, 3 bates de béisbol con sus respectivas pelotas (así ninguno de los varones se pelearía por el del otro), para las niñas dos muñecas gigantes de esas que venían con tetero chupón y pañales, ah sí, eso también soñaba, pañales desechables para la nena más pequeña de la casa, un camión entero de pañales desechables a ser posible, así no amanecerían mojados más nunca y no estarían todo el día con ropas oliendo a pipí, ah pero si cada uno tendría su cama entonces ya más nadie amanecería mojado se repetía mientras se sonreía en el sueño... "despierta muchachito ya llegamos a la parada final"... esa voz, la de Moncho, el conductor, esa voz era la que siempre le despertaba en el autobús y en la vida, con esa voz volvía a la realidad, su realidad.

Durante el día Sebastián caminaba por todo el mercado, le daría quizas más de mil vueltas, pero nunca lo sabía con certeza porque el cansancio y el hambre sólo le permitían contar hasta 1000, a eso de las 2 de la tarde se sentaba y recordaba las palabras de su mamá que le decían que podía comerse una hallaquita si se le hacía muy tarde y no las había vendido todas, pero Sebastián aguantaba todo lo que podía porque sabía sumar lo suficiente para entender que vendiendo esa hallaquita ganaba lo que necesitaba para llevar varios platicos de comida a su casa y al ver que le quedaba poco, siempre, a las dos de la tarde, se sentaba y rezaba un padre nuestro, sí, un padre nuestro!, esa era su forma de llamar la buena suerte, y luego de ese padre nuestro se levantaba con la certeza de que le llegarían todos los clientes que necesitaba para venderlas todas y volver a casa.

Volvía a casa todos los días como a eso de las cinco, no tan tarde por temor a los malandros que siempre se despertaban con la oscuridad, eran algo así como vampiros, vampiros a los que Sebastián les tenía mucho miedo, vampiros que esperaban a todo el que se había levantado temprano como Sebastián para ir a trabajar duro para que pagaran lo que ellos consideraban un peaje, un pago por vivir en esa zona, protegido por ellos, había muchos días en los que Sebastián lograba escaparse de ellos porque vendía todo muy pronto y llegaba a casa temprano, pero cuando no era así, él pagaba sin defenderse, porque sabía que en ese, su cerro, su barrio, las reglas injustas como esas no las hacían los niños como él, los niños como él sólo las cumplían.

Llegaba a casa Sebastián, algunos días con más o menos dinero, pero siempre con lo suficiente para llevar la comida a la mesa, sus hermanos que iban a la escuela le esperaban con los libros abiertos para una nueva explicación, a aquellos que se quedaban en casa todo el día, porque no tenían edad para ir a la escuela, les volvía a repetir a diario como era que se tenían que encerrar y no hablar ni llorar ni nada para no alertar a algún vampiro de los que acostumbraban a despertarse de noche, pero que se despertaban durante el día con los llantos de niños, los niños dejaban que Sebastián hablara y repitiera cosas que le atormentaban a él y a su madre al dejarlos solos a diario: "si les tocan la puerta no abran, con fuego no se juega, no se acerquen a la cocina, no lloren,los vampiros se despiertan así, aún si se caen, no lloren, no jueguen, la televisión la ven sin bulla, la comida es la que dejamos en la mesa y si no hay comida algún día, no se me preocupen que yo llego al ratico" y así todos escuchaban, mientras Sebastián leía las tareas que les tocaban a los otros que sí salían a estudiar.

La madre de Sebastián llegaba a casa, cansada por tanto trabajo, pero se alegraba siempre al ver que todos sus hijos seguían allí, que nada les había pasado, les abrazaba y besaba uno a uno, les preparaba de comer y cuando todos dormían, excepto Sebastián porque él siempre terminaba enrollado en alguna tarea, ella se ponía a hacer sus hallaquitas dulces mientras cantaba, era aquel momento, con su madre amasando el futuro de todos, mientras entonaba canciones como nadie podía hacerlo, era justo aquel momento en el que Sebastián se sentía pleno y orgulloso por contribuir con esa madre a la que algún día haría Reina, porque eso era lo que soñaba en el autobús que le conducía al centro y todas las noches mientras dormía abrazado a sus hermanos en la misma cama.




Escrito para todos los niños que sueñan y son felices a pesar de las circunstancias.

69 comments:

Victor Escalona said...

Como todas tus historias: Excelente!.
¿Como no se va a inspirar uno?
Una periodista de Texas me hizo una entrevista sobre la canción que compuse gracias a ti.
Puedes leerla aqui:

http://www.aldiatx.com/sharedcontent/dws/aldia/entretenimiento/col/lore/vitindex.html

Es un periódico para la comunidad latina.

Saludos

Victor

Victor Escalona said...

Otra vez:

http://www.aldiatx.com/sharedcontent/dws/aldia
/entretenimiento/col/lore/vitindex.html


Saludos

Victor

Fernando said...

hermoso cuento de lo que debemos hacer desaparecer..besos

alida said...

Hay tantos Sebastián en nuestro país ufsss con grandes sueños, excelentes letras
Un gran beso

Anonymous said...

Es precioso waiting. :)

Masmi said...

Que dura es la vida de esos niños, y a pesar de ello con que ilusión siguen luchando.
Muchos besos

Sir NIck... said...

Lo que mas me emociona de tu historia, es que a mi no me la contaron...
..yo la viví, naci y creci en un barrio caraqueño con amigos que se ganaban a pulso el dinero para mantener sus hogares, gente que ahora es profesional y ya no quieren volver al lugar de donde salieron...
..y lo mas importante, saber que aún hay quienes estan en esas circuntancias y son felices...

Un abrazo Wait..

egamaga said...

que lindo waiting, he disfrutado mucho tu historia, porque hay cantidad de personitas adultas, que se desenvuelven en los cerros de nuestras ciudades, q se cuidan y cuidan a muchas otras personas pequeñitas...valga este cuento para recordarlos siempre¡
un abrazo
Ega

...flor deshilvanada said...

Ay se me estrujó el alma, Wait!!

Lo que me da tristeza es que hay muchas más historias como las de Sebastián... hay tantos chiquitos pasando por eso!

Un beso!

Capochoblog said...

Hay por cada Sebastian en la calle, una promesa rota, una promesa sin cumplir... ningún bebé debería pasar por eso jamás pero esos Sebastianes de la vida, son los mejores seres humanos con los cuales uno se puede topar.
Besos preciosa.
Se me arrugo el corazón como una pasa.

TORO SALVAJE said...

Waiting no tengo palabras.

Es un cuento hermoso, tan hermoso que me quedé en blanco.

Te adoro.

Besos.

Anonymous said...

Manita porque me haces esto.... no puedo dejar de llorar.
TQM
PD: No entiendo con lo bien que escribes como no ganaste el concurso...
:(
Joslami

Anonymous said...

Vengo a comentar con el corazón chiquitico, Waiting!

Éste es un tema que me produce muchas sensaciones, sentimientos encontrados de los que no tengo control.

Pienso en los niños que he visto, en los que no he visto pero me han contado y -con la mayor tristeza- en los que aún están por venir al mundo para vivir en esa situación, o probablemente en alguna situación no tan "feliz".

Iba a escribir un testamento de comentario, pero mejor no...

Nostalgia said...

bella historia, Waiting.
y yo de gorda me detuve en las hallaquitas.
y me las imaginé calientitas, olorosas.
y lloré :(

Genín said...

Pues a mi se me arrugó el corazón y poco a poco me fui cabreando mas y mas, no hay derecho que existan familias como as de Sebastian, incluso en peores situaciones, tan precarias, y uno se ve impotente, y al final haces como mariale que se te agua el guarapo y dejas el comentario de este tamaño.
Me gustó mucho tu cuento-realidad.
Un beso y salud, Genín

Turkita said...

lastimosamente esa es una cruda realidad...hay muchas personitas como Sebas....me voy con mi corazon arrugadito...




besitos...

Verbo... said...

Ese es el momento Glorioso, el disfrutar la presencia y el cántico de su Reina.

Bello ♥

M.

Tahylú R. said...

Que lindo lo que has escrito. De verdad esos pequeños adultos, son dignos de toda la admiración posible. Son los que no se dejan vencer, y los que a pesar de todo agradecen el tener aunque sea poco. Es muy triste que unas pobres criaturas inocentes tenga que llevar una vida tan dura. Ojalá no fuera así.

:(


Tahylú!

Janecita. said...

La pobreza infantil es un tema que me destruye.

Me hiciste recordar la canción "Los hijos de la oscuridad", de Franco De Vita.

Te dejo una sonrisa :) La misma que me encantaría ver siempre, SIEMPRE en todos los Sebastián del Mundo.

Francisco Pereira said...

Miles de Sebastianes deambulan por nuestras calles.
Hermoso y sentido relato.

Resiliente said...

Me hiciste emocionar porque es una historia que se hace realidad en miles d eninos de latinoamerica. besos.

Anonymous said...

Preciosa historia

Carmen said...

Verdaderamentes un cuento muy bonito, me ha gustado leerlo. Saludos.

●KiwiHandmade● said...

Waiting sabes que recién llegada a este país, recuerdo que entre quejas le comente a una gran amiga lo mucho que me aburría hacer mercado. Pues, yo consideraba que le hacia el trabajo a varias personas. Por ejemplo: caminar hasta el sitio donde están los carritos del automercado para buscarlo y meter la monedita, pesar las verduras y poner los ticketcitos. Para luego continuar con el momento que para mi era el mas estresante LA EMPAQUETADERA. Pero claro, como no iba a ser estresante. Uno: yo no tenia la técnica de ellos. Dos: por eso mismo, la gente se desesperaba y me ponía mala cara y mas me estresaba. Como no iba a ser así? si lo que yo sabia era hacer mercado en Caracas en el Plaza o el excelsior donde hasta la comida estaba bien clasificada en bolsas. Aquello que era de nevera iba solo, lo de limpieza en otras tantas, y así iba. Aquí luego del estrés, ya bien sudada, sigo para cargar mi carro con mis bolsas bien desastrosas en unas podías conseguir un paquete de queso, yogures y un limpia poceta (jeje ya eso mejoro). Para terminar y darte la vuelta y llevar a su sitio el carrito para devolverte tu moneda. Porque esa monedita son unos churupitos.

Lo que ella me dijo fue algo así como...: " Te parece justo que esos niños que lo hacen en nuestro país no estén en el colegio? o pasen tanto trabajo? En cambio aquí, de este lado del mundo esos niños están, donde deben estar, estudiando.

Después de ese día MAS NUNCA pensé en lo pesado de la tarea. Lo único que lamento no poder contribuir en donde debería.

un abrazo y te aviso con tiempo :D

Syl said...

De la historia de tantos millones de niños así, deberían aprender los niños de los países desarrollados...que no son felices si no les compran la play XPJKL...

Precioso cuento Waiting

Besitos.

Waipu Carolina said...

Bueno, bueno y bueno. Qué hermoso mi niña bella! Me quedé tan emocionada!
Qué simplicidad puede haber en la personas que poco tienen y que en cambio se conforman con ello y agradecen cada cosita que el cielo les puede dar.
Porque sufren, porque es la vida que les ha tocado y deben echar pa'lante y nada más.
De verdad que no esperaba menos de ti, que a parte de nuestra amistad vengo a leerte porque me encantas.
Y por cierto, ahora mismo hago unas hallaquitas que tanto añoro.

Mil abrazos

Azul... said...

La historia de tantos niños no solo en Venezuela, sino en el mundo entero, contada como solo tú sabes hacerlo :)

Llevo un buen aquí, leyéndote, nunca visito a las carreras y a ti menos que a nadie, porque es relindo estar aquí

Un besote, Waitingcita bella

gloria said...

COMO QUISIERA TENER UNA VARITA MÁGICA Y CAMBIARLE EL FUTURO A TANTOS NIÑOS OLVIDADOS, DESTRUIDOS, MACHACADOS DE TANTO DOLOR. AVECES PIENSO QUE SON PEQUEÑOS MÁRTIRES Y QUE GRACIAS A ELLOS AÚN SEGUIMOS AQUÍ.
TIERNA Y DOLOROSA HISTORIA AMIGA, TE MANDO UN BESO.

cielo azul said...

Hay una graan cantidad de pequeños que sufren lo que Sebastian y aún así son muuy felices!!

Es para ponerse a pensar lo que realmente uno "padece" o sufre en comparaón con ellos no???

Abracitos desde mi cielo!

Lata said...

Waitingcita hermosa...
¡Qué lindo relato! Es triste pero lo escribes bellamente.

No sé ni qué decir, pero son realidades que se ven por todos lados... snif. Desgarra el alma.

Un abrazo.

Anonymous said...

Está precioso nena. Haces que valore lo que tengo aún más. Besos y feliz finde.

Jackie said...

Es como para que lo lean mis niñas, Wait, muy conmovedor ♥

BETTINA PERRONI said...

Adoro la inocencia... es lo que más hay que preservar, cuidar esa inocencia que albergan los niños y que los hace libres.

Faltan solo 2 días ;)

Carlota said...

Los niños siempre sonríen a pesar de la circunstancias.... eso hace más cruel, todavía, que su vida no sea feliz...
Es una historia hermosa
Mil besos!!

NORKA said...

Parecida a miles de historias a miles de Sebastianes verdad ? y màs acà en nuestro Paìs triste y lamentable la cosa, el punto lo importante es que estos chamos le sigan echando pichòn, sigan adelante y no decaigan ya que lo otro terrible son las decisiones macabras que a veces toman por encontrarse en esa situaciòn, igual como dice un pana nùnca falta aquel que es tan pero ta pero ta rico que lo ùnico que tiene es dinero...

Hermosa el Arca que los adorna y me creeo la belleza de Amsterdan no solo por el Arca vives tu ahi ojos lindos lo demàs viene por añadidura ;)

Besos de tu Savoy favorito.

Pdta: EL LUNES MIRA TU CIELO POR LA NOCHE AHI ESTARÈ SALUD !!!

NuNú said...

Qué historia! Lo que más me toca no es el que tú la hayas escrito, es que es una historia real, en mil ciudades quizá no con hallaquitas,pero son los mismos niños con la misma alma enormeeee. Cuando uno conoce no puede mirar más hacia otro lado.
Me quedo con la alegría de las canciones y del esfuerzo de ese momento con Sebastián y su mamá. Me quedo con toda esa armonía

Miguel Pinto said...

Hacía muuucho tiempo que no leía una historia tan bonita y cargada de relidades y sentimientos.

Waiting tú eres mi ídolo, de verdad, solo una persona con tu sensibilidad podría escribir una historia así de intensa y a la vez reflejar de manera tan brillante una realidad que muchos de nosotros hemos podido ver.

Vamos a tener que almorzar en estos días para felicitarte en directo.

Lágrimas de Mar said...

la felicidad de las personas está en el corazón

besos

lágrimas de mar

Anonymous said...

Hey you!
Vine a traerte un link que no tiene nada que ver con tu lindo post, pero quizás te guste...

http://blogs.20minutos.es/quefuede/
post/2008/04/05/quao-fue-de-gullit

Benedetto said...

g r a c i a s !

Denise said...

Lo más triste es que no sea ciencia ficción. Aunque siempre he admirado a la gente que le pone una sonrisa a todo :-)

marichuy said...

“Al hacer sus hallaquitas dulces mientras cantaba […] su madre amasaba el futuro de todos”

Que bella metáfora, mi querida Waiting

Besos

Anonymous said...

Waiting, creo recordar que hoy estás de cumpleaños.

Siendo así, recibe mis felicitaciones y mis sinceros deseos de que este día te traiga como regalo mucha dicha, toda la que mereces!

Unknown said...

Más de uno debería leer este post antes de soltar alguna barbaridad de las personas que tienen que emigrar por culpa de la falta de trabajo o por gobiernos irresponsables. Hay muchos sebastianes que trabajan como burros, y otros tantos que esperan que su mami vuelva de otro país.

NORKA said...

... Noi non siamo soli ;)

Tenemos la misma idea, las mismas o muy parecidas.

Te quiero burda.

Ah!!! no olvides ver tu cielo hoy... buena vibra amiguita ♥

Capochoblog said...

HAPPY B-DAY TO YOUUUUUUUUU
BIS...
BIS.. WAITTTTTTTTTTTT
HAPPY B-DAY TO YOUUUUUUUUUUUUUU!!!
TQM!

Yolanda Fernández G. said...

...se me adelantó Capochoblog...

Te deseo lo mejor del mundo en tu cumpleaños, que siempre haya paz, abundancia y mucha salud en tu vida, mi querida Waiting.

¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!!

Ade said...

Querida Waiting, estuve por esas queridas tierras tachirenses y me acordé mucho de ti y tu abuelito con su aguamiel.
Que bello escrito y lo mejor es que nos dejó con esperanza. Aqui exiten los Sebastian que cualquier tarde llegan al cielo por culpa de una bala perdida ...
Un beso
Adela

Ade said...

En el camino de los comentarios me enteré de tu cumpleaños, recibe muchos cariños y mis deseos por una vida con mucha paz, amor y salud.
Un beso
Adela

Ade said...

En el camino de los comentarios me enteré de tu cumpleaños, recibe muchos cariños y mis deseos por una vida con mucha paz, amor y salud.
Un beso
Adela

mi said...

FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!!!!!!!
Un bestototototote.
Que la pases rico.

BETTINA PERRONI said...

Es hoy verdad?

FELIZ CUMPLEAÑOOOOOOSSSS!

Mil bendiciones para ti en todo abril :D

El Trimardito said...

Mucho Sebastián hay regados por el mundo entero, niños con sueños, ilusiones y esperanzas de encontrar una vida mejor. Gracias por ese relato.

Saludos!!

Waiting for Godot said...

Gracias a todos por los mensajes, gracias mil a aquellos que me han felicitado por mi cumple, estoy de viaje por eso no les había agradecido con anterioridad, se les quiere mucho :)

Besos

guada said...

el relato como todos precioso, desprende ternura y sensibilidad a raudales, ais,
por cierto feliz cumpleaños y que lo pases genial
un beso

K4RMIN4 said...

Soñar, soñar, soñar, Dios permita que no perdamos la capacidad de soñar, aunque los sueños de los adultos no sean tan hermosos como los de los niños.

un dress said...

lindo!

a harmonia de SER harmonioso!

como só tu sabes dizer! :)




mil beijOs

RosaMaría said...

Cuánto amor en la familia! A pesar de los sacrificios las privaciones, cuánta bondad y generosidad en esa gente. Hermoso relato. Un abrazo

Drowngirl said...

Que preciosidad!!
La verdad que hay mucha gente que sueña y sigue luchando en esta vida con una sonrisa a pesar de las circunstancias..
un beso para todos ellos..y otro para ti

DaliaNegra said...

Tremenda historia,hermoso niño,ojalá ningún niño trabajase...ojalá no hubiese vampiros,ni los de esas calles ni los de las oficinas lujosas.
Ojalá el mundo fuera cálido,seguro y generoso como tu corazón.
Besos***

Dudu said...

Ayyyyyyy mi waiting q bellezaaaaaaaaaaaaaaa...........y pensar que entre sus calamidades algunos de estos niños son felices....me has puesto el corazon de hormiga..no se vale.....
se te quiere grande.

Dudu said...

Mi waiting FELIZ CUMPLE!!!!!!!!!!!!!!!!!que dios te traiga multiples bendiciones.

Anonymous said...

Hola querida waiting! por los comments veo que cumpliste el 07?? si es asi espero que la hayas pasado espectacular, he venido a leer tus lineas, un abrazo!

Catalina said...

Oh....

sin palabras

la historia de tantos Sebastianes

bella waiting! la historia y tu!

Venezolano1975 said...

Muy hermoso hiciste que se me aguaran los ojos.
Saludos
José

*Aire* said...

Yo quiero creer en el esfuerzo inocente. Yo quiero creer que los niños que anhelan y necesitan son como mi padre, que poco a poco ha logrado esos sueños que dibujó en las calles mientras repartía arepas y papitas. Yo quiero creer, en serio, pero aquí sólo me dejan ver drogas, ansias de poder, dinero fácil, ya no siento inocencia, ya no veo infancia ni niñez límpida =( Y soy consciente de que ese niño que roba billeteras en el metro no es responsable de su realidad. A el tampoco lo dejan creer, a pesar de que realmente lo quiere... Él tampoco puede comprar con buenas intenciones sus sueños en medio de esta tierra hostil en la que si no destruyes, te tragan...

Pina said...

una storia bellissima e commovente...

Adriana said...

Linda historia! me conmovió.

Saludos

Champy said...

Hijole mamacita ahora si que me hiciste pasar por un chingo de recuerdos.....

Me encantó tu dedicatoria, no se.... en algun moimento sentí que yo estaba incluido.....

Sebastián.

Ya tengo algunas semanas con un coraje acumulado, con una tristeza bien honda con una depresión horrible....

Realemnte estoy afectado por lo que esta sucediendo aqui y allá, pasando por China Tibet Venezuela Ecuador, Colombia, Francia, Palestina... y pos supuesto México.

Siempre he estado convencido que los Sebastianes valen la pena, y deben ser el motivo de partirnos la madre bien duro por ellos, pero una vez quye te llega el olor de la maldad humano, una vez que sientes el trancazo del alcance de los que no les importa nada solo su bienestar pérsonal, y lo más terrible, sin importarles el costo que los Sebatianes pagan....

dejo de creer.

me apago.

Necesitamos millones y millones de Waitings, y bien esparcidas por todo el mundo, para que con su aroma maten esta apestilencia.

Te regalo una rosa blu.